ZEISS Axioskop

Zeiss Axioskop 50

Entre los microscopios profesionales de las grandes marcas que más se han vendido a lo largo de los últimos 30 años está la gama Axioskop de Zeiss. Concretamente vamos a hablar aquí del Zeiss Axioskop 50. Es un microscopio muy bueno que cumple todo lo que se le puede pedir a un instrumento de calidad. Es robusto, con un peso considerable, pero no ocupa mucho espacio sobre el la mesa. Es preciso mecánicamente. Su sistema de enfoque es simple y eficaz. Tiene una buena iluminación. Lleva de serie una lámpara de 50w, aunque está preparado para llegar a 100w. Es muy ampliable, porque Zeiss fabricó todos los accesorios necesarios. Ópticamente tiene una gran calidad, campo de visión amplios y todo tipo de configuraciones de objetivos y técnicas. Así pues, el ZEISS Axioskop 50 es un estupendo microscopio. Vamos a analizarlo brevemente en esta entrada.

El Estativo

Lo primero que llama la atención en el Zeiss Axioskop 50 es la esbeltez de su estativo. Generalmente los microscopios de su categoría son más anchos. La base del Axioskop tiene forma de T. Sus cuatro apoyos sobre la mesa están pensados para proporcionar una gran estabilidad. Tiene dos en la parte de detrás, más separados, y dos en la parte delantera, casi juntos. En realidad, la mayoría de microscopios presenta esa disposición, también la serie BX de Olympus y los DM de Leica. Pero el Axioskop es más estrecho. Su estrechez, que parecería ser un inconveniente de estabilidad no lo es, gracias, a su buena construcción. Las «patas» de goma tienen la elasticidad y firmeza suficiente para hacer del Axioskop un instrumento muy estable. Al mismo tiempo, al ser más estrecho nos deja mucho espacio libre en la mesa, y el acceso a la parte posterior es más fácil

Microscopio Zeiss axioskop 50
Vista frontal del Zeiss Axioskop 50

La parte frontal de la base es bastante estrecha. No hace falta más amplitud para dar cabida al espejo y al sistema del diafragma de campo. De esta manera tenemos mucho espacio en la mesa. Veamos una imagen posterior.

Vista posterior Zeiss Axioskop 50
Vista posterior del Zeiss Axioskop 50

Aquí destaca la «casa de la lámpara» de tamaño considerable. En ella se puede alojar hasta una lámpara de 100w, aunque para eso deberemos tener una fuente de alimentación externa. Con la fuente incorporada al microscopio, como se ve en la imagen, lo máximo permitido es una lámpara de 50w, suficiente para la mayoría de las técnicas. En este modelo podemos ver también el tren para la iluminación superior, en el que se puede instalar el mismo iluminador para una iluminación episcópica en campo claro o un iluminador para fluorescencia. También vemos el botón verde de encendido y el mando para la regulación del brillo.

Accesorios y otros elementos.

Iluminación incidente.

El microscopio admite gran variedad de configuraciones y se presenta de muy diversas formas. Un sistema básico sería un binocular, sin optovar e iluminación exclusivamente diascópica o transmitida. En el modelo de la imagen superior, vemos que está disponible para iluminación superior episcópica. Esto es una gran ventaja porque nos permite acceder a todas las técnicas que requieren ese tipo de fuente de luz. Para ese tipo de iluminación disponemos de un diafragma de campo centrable, además de un portafiltros en forma de deslizador (slider). Abajo podemos ver el despiece de los elementos que lo componen.

Como hemos dicho antes, el mismo iluminador que se utiliza para la técnica con luz transmitida se puede colocar para la luz incidente.

El Cabezal.

El cabezal puede ser básicamente binocular o trinocular. Dentro de los cabezales trinoculares tenemos varios tipos distintos. En este caso, en la primera foto vemos que el cabezal admite la salida de la imagen hacia los oculares, hacia el fototubo o en una proporción 30/70% entre oculares y fototubo respectivamente. Hay otro modelo más básico que sólo perite seleccionar entre oculares o fototubo.

La diferencia exterior entre los dos modelos es un mando con una bola negra en su extremo situado en el lado izquierdo del cabezal y un diagrama con las diferentes configuraciones en el modelo superior más configurable, mientras que el cabezal que sólo admite elegir entre oculares o fototubo es todo blanco.

El diámetro de inserción de los oculares es de 30mm y el tubo presenta en su parte superior una hendidura donde se encajan algunos modelos de ocular para que éste no gire. No todos los oculares tienen estas características, que se manifiestan por la presencia de un pequeño tornillo en el lateral del ocular y que encaja en la hendidura. Personalmente me resulta muy útil porque a veces utilizo un adaptador de ocular para fotografía con el teléfono móvil. Al no girar el ocular por el peso del teléfono, la imagen aparece centrada y en posición.

Optovar o Portafiltros de fluorescencia.

Zeiss inventó para sus microscopios de la serie Standard un sistema que tuvo mucho éxito: el Optovar. En los Axioskop, el sistema se conservó aunque con menos prestaciones. Básicamente se trata de un sistema óptico que permite aumentar la capacidad óptica del microscopio por 1,25x y 1,6x sobre los objetivos seleccionados. Así, con un objetivo de 100x y un ocular de 10x alcanzamos los 1000 aumentos. pero con el sistema Optovar llegamos hasta los 1250x incluso los 1600x. Evidentemente la capacidad de resolución no va a mejorar porque como es sabido ésta depende directamente de la apertura numérica del objetivo, pero en muchas ocasiones el Optovar es un gran recurso. Veamos unas imágenes del sistema.

Este Optovar de la fotografía tiene un agarre superior y por tanto se instala sin las características aletas que presentan algunos Axioskop, como el de la segunda fotografía de arriba, que sirven mayoritariamente para proteger del polvo. En esos casos el Optovar se desliza usando un agarre inferior.

En el lugar del Optovar y con las mismas dimensiones se puede insertar el portafiltros para fluorescencia de Zeiss, que en el Axioskop 50 aún no funciona con el sistema de cubos, sino de filtros y espejos independientes. Hasta cuatro posiciones presentan los portafiltros que se pueden configurar a voluntad.

Elementos de iluminación transmitida.

Después del iluminador del que ya hemos hablado existe un filtro y una lente colectora que dirige la luz hacia un espejo completamente cerrado que forma parte del diafragma de campo. Es muy compacto y fácil de sustituir.

Entre estos elementos existe un vidrio rozado o esmerilado cuya finalidad no es muy conocida. Está en el lado derecho de la base, junto a la perilla de enfoque. Se puede retirar o colocar en el camino de la luz con la ayuda de una llave allen de 3mm y sirve para la correcta configuración de la iluminación. Para ver el filamento de la lámpara.

El revólver portaobjetivos.

Suele tener una capacidad para seis objetivos. Es muy amplio y robusto y marca la diferencia con microscopios más modernos o de gama inferior. Bastante pesado, resulta muy fácil de montar y desmontar con sus ocho tornillos superiores, que lo fijan a su soporte y al estativo. Su funcionamiento es muy suave gracias a su amplísima pista de rodamiento a bolas, con unos «clicks» muy marcados en las posiciones de los objetivos.

El mando que se ve en la tercera fotografía, a la izquierda del revolver (en su posición normal estaría frente al microscopista) tiene que ver con el Optovar o el portafiltros de fluorescencia. Para extraer estos elementos hay que tirar hacia nosotros para liberar los accesorios que mencionamos.

Platinas y condensadores.

Existe bastante variedad de platinas con diferentes tamaños, con mandos a izquierda y derecha. Como curiosidad, decir que la mayoría de platinas de los microscopios de la series Standard encajan el Axioskop, al menos las más modernas de los modelos grises, que se sujetan con cuatro tornillos. Lo único es que tienen el mando coaxial XY algo más corto que las originales para el Axioskop. En anteriores imágenes podemos ver los típicos condensadores Zeiss de 0,9 NA con lente abatible, y aquí abajo un condensador para contraste de fases y campo oscuro en seco.

En posteriores entradas comentaremos los elementos ópticos y sus características, así como los ajustes que se deben hacer al microscopio para un funcionamiento óptimo y sacar así todas sus capacidades.

En resumen, el Zeiss Axioskop es un microscopio muy sólido y versátil. Con una mecánica sencilla y muy efectiva. No es un microscopio delicado que se desajustan con facilidad. Es muy fuerte y robusto y fácil de desmontar y de ajustar. Dispone de muchos accesorios a muy buen precio. Es de óptica corregida al infinito y con una calidad de imagen inmejorable.

Una muy buena elección.